“La noche de los tiempos” de Antonio Muñoz Molina
Es ésta una obra fundamental para
acercarnos a comprender la guerra civil española de 1936. El protagonista, Ignacio Abel, es un arquitecto de éxito, de
ascendencia muy humilde, a quien la contienda sorprende ideando y supervisando
las obras de la Ciudad Universitaria
Casi desde el
principio, porque la novela da saltos en
el tiempo, encontramos a Ignacio
Abel camino del exilio, tomando trenes y barco hacia Norteamérica. Cargando
con su vieja maleta de madera nos cuenta en primera persona cuánto amaba a sus
hijos y a su profesión, también a su amante extranjera, antes de que el mundo se
rompiera.
Se detiene describiéndonos cómo transcurrió
su existencia el día en que la guerra
estalló en Madrid: era un domingo caluroso de julio y él con su familia veraneaba el la sierra. Esa
misma noche perdió a sus hijos y a su
esposa, quedándose sólo con sus recuerdos y una carta larga de su despechada
mujer, que desgrana punto por punto en los distintos capítulos.
El país y el
protagonista se tambalean tras unos años de esplendor, éxito profesional y
libertad política con la segunda república. Como él mismo comenta, los hombres que hicieron la guerra, al
igual que las mujeres que la soportaron, no estaban mejor ni peor preparados para
ella que cualquier otra generación. No eran héroes ni se comportaron de forma
distinta a otros españoles a los que la guerra haya sorprendido en diferentes momentos
históricos. Sencillamente, salieron a encontrarse con su destino. Y lo hicieron con valentía, en medio de la
general desolación. Negrín, Bergamín y decenas de personajes comunes con sus
fabulosos diálogos describen a la perfección el ambiente bélico madrileño en
los últimos años de la década de 1930. También
la miseria y desesperanza del exilio, donde un hombre huye de su casa y de su
patria con un poco de ropa soñando con un nuevo puesto de trabajo, y
añorando el amor perdido al estallar la guerra.
Encontramos dentro
de sus páginas reclutamientos a la fuerza, fusilamientos, traiciones,
delaciones, hambre, confiscaciones de coches y viviendas….La prosa de Muñoz Molina es implacable y certera, precisa. No
escatima adjetivos a la hora de describir el horror y la añoranza del
protagonista por los tiempos antiguos de su juventud y desde luego de su
madurez.
La noche de
los tiempos es densa. Está escrita magníficamente
por uno de nuestros grandes maestros literarios. Las referencia históricas a marco geográfico, dirigentes políticos y
fechas son perfectas. Los personajes secundarios esclarecen lentamente la
trama personal del protagonista, al que la guerra arranca su tranquilidad
familiar y amorosa. El enfrentamiento civil en Madrid es duro y sorprendente, así como el exilio de nuestro
arquitecto a Estados Unidos, llegando a Nueva York por la estación de
Pensylvania y al hotel al que consigue acceder.
La carta que Ignacio a su vez escribe a su
esposa, así como sus divagaciones mentales centran el argumento de esta obra
psicológica y social, donde el sufrimiento de un país en ruinas, en el que todo
el mundo tiene que renovarse y encontrar otra nueva forma de vivir, se antepone a las vivencias de los años
anteriores, que en el caso del arquitecto eran anodinas
y acomodaticias, poco sinceras, en una palabra.
Se trata, sin
duda, de una gran novela sobre la guerra
civil española y sobre la capacidad de
los humanos para adaptarnos a las circunstancias sobrevenidas y a la adversidad
más absoluta.
ISBN:97848432251009
Tipo de novela: histórica
Número de páginas:960
Editorial: Seix Barral
Año de publicación: 2011
Autor: Antonio Muñoz Molina (Úbeda, Jaén ,1956)
Resumen de la biografía del autor: Es periodista, escritor y miembro de la Real Academia de España. Recibió el Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2012
Otras obras del autor:
"Beatus Ille"
"Beltenebros",
"Todo lo que era sólido"
"Beatus Ille"
"Beltenebros",
"Todo lo que era sólido"
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